Objetos deportivos en forma de «ataditos», la nueva muestra del artista Carlos Herrera

Prendas y objetos que fueron usados para la práctica deportiva son reconvertidos por el artista en piezas artísticas. Condensadas en una única forma, hablan del erotismo masculino y del paso de la adolescencia a la adultez.

Una pelota estilo “pulpo” y un par botines “atados” entre sí. Están bien compactados con una cinta de embalaje y lucen prolijamente colgados sobre una pared.

Su presencia enamora a los visitantes, como tantos objetos que hay en la sala, los packs de “ataditos” exhibidos, como un par de botines gastados, una media azul que cuelga desde adentro y un joystick que apenas se deja ver. El cable simula un péndulo.

La escena se repite a medida que uno recorre este espacio compuesto por una colorida variedad de prendas y elementos deportivos, muchos de ellos son de fútbol: botines de los ‘90 (algunos con barro en los tapones) o unas “zapas” rotas o viejas, una pelota, un short, unas canilleras fluo o una camiseta. Están todos sujetos a la pared.

Mientras, unos “monstruos deportivos” custodian la sala: llevan una camiseta rota, slips, cordones, vendas, guantes, medias, rodilleras, la suela de una zapatilla o parte de ella, retazos de shorts deportivos, cordones, mangas deshilachadas, camisetas y jirones de casacas que cuelgan por todas partes.

Parece un local de deportes pero es una galería de arte deportiva. Con el fútbol en el corazón y en la sangre, Temperatura perfecta es la gran muestra que se exhibe en Futbolitis, el espacio que fusiona el fútbol con el arte y otros deportes en Thames 1876.La primera obra de la serie «Ataditos» nació en 2006. Foto gentileza Futbolitis.

Este lugar atesora más de 60 obras: hay unas 15 de pie, alrededor de 5-6 “cabezas” y los famosos “ataditos”, unas 40 obras con tres o cinco elementos atados a presión sobre la pared. La expo estará abierta gratis hasta el 8 de julio en la galería de Palermo Hollywood.

La serie es de Carlos Herrera, el artista rosarino que confeccionó un sinfín de piezas deportivas entre 2006 y 2011. Algunas participaron de la Bienal de Estambul (2011).

Para reunir su monumental obra, la galería se contactó con coleccionistas que prestaron su “tesoro” más preciado, cuyo valor simbólico es incalculable, para exhibirlas en conjunto. Hay más de 60 obras que elaboró Herrera, artista visual exclusivo de Ruth Benzacar, la galería que lo cedió a Futbolitis para hacer posible la expo.

Estos elementos están vinculados a la práctica de deportes como el rugby, básquetbol, boxeo, voleibol y ciclismo, pero especialmente al fútbol. Cada pieza remite a un pasado no tan lejano: se trata de la transición de la adolescencia a la adultez, la esencia de Temperatura perfecta.

“Sentí que en esos objetos había una nostalgia pensada en que yo no puedo ser más un futbolista exitoso: tengo que estudiar, tengo que ir a la universidad”, explica Herrera a Clarín Cultura.

“Había que dejar esa fantasía adolescente, ser más estudiante y no tanto futbolista o deportista. Era decir ‘bueno, listo. Esto me queda como hobby y empiezo a estudiar abogacía, medicina o lo que fuere’”, añade su creador durante la recorrida con este medio.Los «ataditos» de Carlos Herrera. Foto gentileza Futbolitis

De botines y pelotas, a obras de arte

En 1999, Herrera comenzó a registrar a un grupo de adolescentes que eran hermanos de sus amigos de su Rosario natal para hacer un registro fotográfico. “En ese momento tenía 24 años y estaba dejando mi adolescencia”, cuenta el autor intelectual del proyecto.

Luego, registró a un grupo de jóvenes que tenían una banda de rock y una vida deportiva cuando estaban terminando la secundaria. Comenzó a investigar este mundo de adolescentes que transitan entre música y los deportes. Cada vez tenía más contenidos.

Su registro tiene 10 años, hasta 2009, cuando decidió hacer una muestra con 300 registros fotográficos impresos en el Centro Cultural Rojas. Pero el quiebre ocurrió en 2006. “Decidí pedirles a estos jóvenes objetos que tenían destinados al desuso. La mayoría estaban vinculados al deporte”, recuerda.

Todo sirve, nada se descarta. Herrera juntó una gran cantidad de elementos deportivos: botines, zapatillas, camisetas, pelotas, calzas, bolsos, shorts, medias, guantes, un pomo de kétchup, una pasta de dientes y hasta una lata de chocolatada como material de archivo. Así surgió la serie con piezas deportivas que se aprecia en Futbolitis.

Los “ataditos” y la erótica masculina

Su primera obra la hizo en 2006: unos botines Adidas, una pelota pulpo y una camiseta del San Pablo. Estos tres objetos pertenecen a una misma persona, están perfectamente atados a presión con cinta de embalar y se exhiben como obras de arte.

¿El secreto? “Decidí concentrar a través de esta cincha o suncho que se usa de modo industrial para cerrar cajas, embalajes. Se hace con una máquina que precinta con mucha fuerza, con mucha presión y con un engarce de chapa. Es lo que presiona los dos sunchos y los une por apriete”.

Las prendas usadas y con huellas como el barro, sudor o desgaste despiertan nostalgias y emociones en los visitantes ya que algunos materiales, modelos y marcas dejaron de fabricarse. Estos elementos marcaron una época en grandes y chicos.

“Por eso la muestra se llama Temperatura Perfecta. De alguna manera sentí que en todo el archivo de objetos deportivos había mucha coherencia de color, de formas, de olor, de sugestión de los materiales de uso, de decadencia. Había un montón de desgaste, de pérdida y de sudor. Había un montón de simbologías que se unían en el discurso”.

Las obras que debajo llevan un puntito azul pertenecen a los coleccionistas. Se pueden ver unos “ataditos encapsulados” en una vitrina y otros que combinan prendas deportivas como una pelota, una remera o canilleras. Parecen ocultos, pero se dejan ver.Botellas de cerveza intervenidos, símbolo de «tercer tiempo» donde, según Herrera, surgen los erotismos masculinos. Foto gentileza Futbolitis

Mientras, otros “ataditos” agrupan objetos no deportivos, como un joystick o una botella de cerveza. “En el deporte también está el tercer tiempo. Es muy común de la erótica masculina: el encuentro entre cuatro o cinco personas que fueron a jugar y después a tomar una birra, a jugar a los jueguitos o algo que queda del deporte que está relacionado. Ya no jugamos más pero jugamos a través de juegos”, explica Herrera.

También hay unos bustos un poco más altos. Parecen cabezas que vigilan a los presentes, como si fuesen esculturas. Estas obras fueron realizadas en 2010-11 e integran un proceso de obras que Herrera desarrolló cuando ganó la beca de Guillermo Kuitca, en Buenos Aires.

“Es la segunda etapa del proyecto. Están hechas sobre cascos de motos que algunos de estos jóvenes me regalaron”, -comenta Herrera, y agrega-: “están cubiertos con ropa interior, calzas que se usan debajo de los shorts, shorts, medias, o el elástico de un slip que está cortado”.

Sobresale otro busto o “escultura” que contiene un trofeo, una zapatilla de fútbol 5 dada vuelta, un short, una rodillera, una remera verde, una media y una corneta.

El artista rosarino desarrolló este concepto mientras hacía la beca. Consiste en trabajar con las costuras de la ropa, eliminar el contenido asociado al sudor o con lo que la parte textil recupera del cuerpo, vaciarlos y dejar solo las líneas como forma de expresión artística. Por eso, las prendas se transformaron en líneas.

Al fondo de la galería están los “ataditos” hechos con objetos más actuales. Tienen más color, está la presencia del fluo, materiales cromados o el falso aluminio en botines y canilleras.Temperatura perfecta se puede visitar hasta el 8 de julio. Foto gentileza Futbolitis

Las “botellitas eróticas” de cerveza, también de 2006, decoran la sala. Contienen un slip, una media y un cordón de zapatilla, y tal vez otro elemento como una cadenita o medalla. Todas tienen una carta de un juego de naipes porno.

“Es abrir un capítulo distinto donde aparece la sexualidad de un modo más fetichista, aparece lo más íntimo de la persona. Por eso está el slip, la media y el cordón, pequeños elementos de la intimidad, y objetos que son más de contacto con la masculinidad”, explica Herrera.

Temperatura Perfecta, la gran muestra objetos deportivos en Futbolits. Cuando practicar un deporte remite al entrañable momento de la juventud o un pasado no tan lejano, mientras sus prendas tan añejas se traducen en magnificas obras de arte.

Ficha

Temperatura Perfecta – Carlos Herrera

Dónde: Futbolitis. Thames 1876, CABA

Cuándo: de lunes a sábados de 11 a 18. Hasta el 8 de julio.

Entrada: libre y gratuita

Fuente: https://www.clarin.com/cultura/objetos-deportivos-forma-ataditos-nueva-muestra-artista-carlos-herrera_0_0fK9I4flWG.html