Un paraíso de flores flotantes, lo nuevo de Nicola Costantino

En el hall central hay 2.000 flores distribuidas en doce ramos. Están hechas de cerámica y porcelana, y simboliza la conciencia de los artistas sobre el medioambiente.

Un inmenso jardín sorprende a propios y extraños en el hall principal que traspasa el vidrio sobre las avenidas Almirante Brown y Juan de Garay. Como si fueran nubes suspendidas en el aire, doce ramos de flores gigantes les dan la bienvenida a los visitantes en el Paseo de las Artes del moderno edificio corporativo ubicado en Barracas.

De eso de trata PaRDeS: el jardín del tiempo suspendido, la instalación site-specific de flores hechas con cerámica, hilos de deshilachados, alpaca, bronce y hierro que Nicola Costantino acaba de presentar en la Fundación Santander. Su trabajo está inspirado en la naturaleza e irá mutando a través del tiempo. El nombre «pardes» proviene del antiguo hebreo y significa “paraíso”.

“El concepto de ‘paraíso’ es muy lindo, muy interesante: está dado para que todos tomen de él y en el momento tomaba más de lo que necesitaba para ‘acaparar’ quedaba expulsado del paraíso. Me parece la síntesis del gran problema de la humanidad”, señaló la artista que hace una década atrás participó de la 55° Bienal de Venecia con Rapsodia Inconclusa, una obra sobre vida de Eva Perón.

En medio del encierro que provocó la pandemia, la artista rosarina se refugió en su taller y comenzó a crear esta maravillosa obra a ciegas. Costantino imaginó que estaba haciendo algo nuevo pero cuando se puso a investigar descubrió que la técnica de crear cerámica ya existía. Esta destreza ancestral se denomina nerikomi y se utiliza desde hace miles de años en Japón.

El nerikomi consiste en realizar modelos repetitivos de imágenes o dibujos. Y, al agruparlos de forma idónea, componen un motivo decorativo completo. Esta técnica permite crear diseños precisos y minuciosos tanto como el artista (o ceramista) desee. Esta equilibrada combinación del color, modelado e imaginación, hace que el nerikomi sea una técnica muy completa.

“Crear belleza es mi antídoto para el terror que me produce el fin de la humanidad. Quisiera que me vean como un gusano del compost que transforma la podredumbre en poesía”. Toda una declaración de principios de la artista rosarina.

El jardín

El hall central de la Fundación Santander está repleto de inmensas flores flotantes. Hay 2.000 flores distribuidas en los doce ramos. Están hechas de cerámica y porcelana y simboliza la conciencia que toman los artistas sobre el cuidado del medioambiente. Costantino trabajó con hilos de gusanos de seda para completar el primer tramo su obra, que irá creciendo con a través del tiempo.

“Es importante destacar lo barroco en esta obra. Me di cuenta que lo barroco en mi trabajo tiene que ver con la materia que se va a descomponer”, dijo en el día de la inauguración.

“También descubrí el valor del arte de las flores”, agregó. “Es otro prejuicio del siglo XX. Me enseñaron que el artista que pinta flores es un artista sin compromiso. Es como la pintura de mi abuela cuando pintaba flores. Pero cuando las flores fueron motivos de la poética y del arte del siglo del nuevo evo. Fue importantísimo, lleno de poesía y muy valiosas”, destacó.

Una obra “viva”, inclusiva y colectiva

“En la Fundación Santander tenemos una visión que cultura es inclusión, es identidad, es trabajo, es transformación social”, señala Guillermo Tempesta Leeds, vicepresidente primero del Banco Santander y vicepresidente de la Fundación Santander.

En ese sentido, la Fundación invitó a Nicola Costantino para hacer esta instalación inspirada en la naturaleza. Su trabajo adquiere espíritu social ya que la artista se asoció a la Fundación Todavía es Tiempo para contribuir a la producción de su obra que estará vigente durante gran parte de 2023. Su reciente creación demandó ocho meses de trabajo.

«El concepto que me interesa derribar es que el artista tiene que trabajar solo, que la obra es única y exclusiva. Por eso estoy trabajando con gente y me siento muy bien generando fuentes de trabajo», enfatizó la autora de PaRDeS.

La Fundación Santander tiene como propósito acercar el arte a las personas mediante diferentes actividades que incluyen capacitaciones docentes, recorridos escolares y participativos, talleres de formación, charlas y seminarios.

Pardes hace referencia al uso de la cerámica, una técnica que Costantino no tenía incorporada en su trayectoria como artista, como parte de la belleza que ofrece la naturaleza como concepto para tomar conciencia del medio ambiente y en contra de la destrucción de la humanidad.

“La desprecié toda mi vida, para mí era una técnica tradicional y aburrida. Eso es un prejuicio que me enseñó el arte contemporáneo. Quiero superar esos prejuicios. Yo estaba equivocada, no era así: la cerámica es maravillosa. Es una herramienta perfecta”, reconoció.

Esta instalación de flores “vivas” y gigantes podrá visitarse –gratis– hasta noviembre de este año. También habrá una serie de actividades colaborativas donde el público podrá participar los días sábado.

Este jardín vertical irá creciendo con el correr del tiempo, principalmente sobre las paredes y columnas de este edificio moderno. «Vamos a modificar los colores de las flores y vamos a ir tomando cada vez más áreas o sea que la gente que venga durante el año va a ir viendo cosas nuevas», explicaron.

Costantino Básico

• Nació en Rosario, en 1964. Cochon sur Canapé, su primera exposición individual que realizó en 1992, es considerada precursora en el arte contemporáneo latinoamericano.
• En 1998 representó a la Argentina en la Bienal de San Pablo y desde entonces participó en numerosas muestras en museos de todo el mundo, entre ellos, Liverpool (1999), Nueva York (2000), Tel Aviv (2002) y Zurich (2011).
• Sus obras integran prestigiosas colecciones incluyendo al MOMA. También representó al país en la 55º Bienal de Venecia con Rapsodia Inconclusa, un abordaje sobre la vida de Eva Perón. Actualmente vive y trabaja en la Ciudad de Buenos Aires.

Ficha

ParRDes, el jardín del tiempo suspendido, de Nicola Costantino
Dónde: Fundación Santander, Paseo Colón 1380.
Cuándo: de lunes a sábados, de 12 a 18. Jueves de 12 a 19. Hasta noviembre. 
Entrada: gratuita.

Fuente: https://www.clarin.com/cultura/paraiso-flores-flotantes-nuevo-nicola-costantino-fundacion-santander_0_qwD6g70kzQ.html